lunes, junio 16, 2008

Heathrow 16:15

La noche pasó rauda, cansada, apática a la vez que risueña. Viejos amigos, los amigos, aunque faltaban unos tantos. Luego el deseo, fuego incandescente, fatuas sensaciones. El olor de la autenticidad revistió mi cama; tu piel, sábanas de cielo; tu boca, carnosa, manantial inagotable del que brotan tus vigorosos ósculos.

Entrega sin fisuras, juanramoniana firmeza la de tus manos que ya siento tan lejos aunque están presentes, presentísimas en mi cuerpo y mi rostro. Ya el lecho descansará de vaivenes. Cesarán las intermitentes pasiones, las noches de ardor etílico, de tez sórdida o de límpida tez. Más la entraña no cesa. El recuerdo es ayer, sustento de la bestia adormecida. Tus besos, abrasivos, inolvidables, eternos para ti y para mi...ambos lo sabemos. Lo demás ya no importa.

02-07-2005

viernes, junio 06, 2008

Mujer Lejana

Esta mujer cabe en mis manos.
Es blanca y rubia, y en mis manos la llevaría como a una cesta de
magnolias.
Esta mujer cabe en mis ojos.
La envuelven mis miradas, mis miradas que nada ven cuando la
envuelven.
Esta mujer cabe en mis deseos.
Desnuda está bajo la anhelante llamarada de mi vida y la quema mi deseo como una brasa.
Pero, mujer lejana, mis manos, mis ojos y mis deseos
te guardan entera su caricia
por que sólo tú, mujer lejana, sólo tu cabes en mi corazón.

Pablo Neruda ''Para nacer he nacido''